domingo, 22 de abril de 2012

MARCO TEÓRICO Y CONCEPTUAL

MARCO TEÓRICO Y CONCEPTUAL

El desafío educativo del siglo XXI consiste en brindar respuestas que garanticen la educación
a la diversidad, que a su vez, se basen en los postulados que plantea el Plan Nacional de Desarrollo: humanismo, igualdad y cambios.

El Programa Nacional de Educación en su primer objetivo estratégico de la Educación Básica Nacional establece alcanzar la justicia educativa y equidad en los siguientes términos: garantizar el derecho a la educación expresado como la igualdad de oportunidades para el acceso, la permanencia y el logro educativo de todos los niños y jóvenes del país en la Educación Básica.

Para la educación en la diversidad, la escuela debe pugnar por una respuesta a todos los
niños y niñas que asisten a ella; considerando que el ser diverso es un elemento de valor y
un referente positivo para transformar la escuela y formar una cultura escolar.

La estrategia para la atención a la diversidad es la escuela inclusiva, ésta implica procesos
para ofrecer respuestas educativas a todos los alumnos, sin importar sus características de
género, lengua, etnia, edad, estilos y ritmos de aprendizaje, desarrollo cognitivo y afectivo,
nivel económico y prácticas culturales, entre otras. 

Desde el planteamiento del documento de Orientaciones Generales para el Funcionamiento
de los Servicios de Educación Especial, el concepto de barreras para el aprendizaje y la
participación es utilizado para identificar los obstáculos que se presentan en las escuelas.


Técnico Pedagógica en sus prácticas, en la cultura y en sus políticas para que todos los alumnos participen en las distintas actividades y logren los aprendizajes previstos.
Los procesos de integración educativa e inclusión implican identificar y minimizar las barreras, maximizar los recursos existentes o asegurar los que se requieren para apoyar la participación y el aprendizaje de todos los alumnos.
Al identificar las barreras que obstaculizan el aprendizaje y la participación de los alumnos, se identifican las necesidades educativas especiales, es decir los apoyos y los recursos específicos que algunos alumnos requieren para avanzar en su proceso de aprendizaje, por ello, se dice que un alumno o alumna presenta necesidades educativas especiales cuando se enfrenta con barreras en el contexto escolar, familiar y/o social que limitan su aprendizaje y el acceso a los propósitos generales de la educación.

En las Normas de IRARC se define a los niños y niñas con necesidades educativas especiales, de la siguiente manera:
“Es aquel que presenta un desempeño escolar significativamente distinto en relación con sus compañeros de grupo por lo que requiere que se incorporen a su proceso educativo mayores y/o distintos recursos con el fin de lograr su participación y aprendizaje, y alcanzar así los propósitos educativos. Estos recursos pueden ser:
Profesionales (personal de educación especial o de otras instancias gubernamentales o particulares), materiales (rampas y aumento de dimensión de puertas, entre otros) y curriculares (adecuaciones en la metodología, en la evaluación, contenidos y/o propósitos).
Las necesidades educativas especiales se definen como: “los requerimientos que surgen de la dinámica establecida entre las características personales del alumno y las respuestas que recibe de su entorno: se traducen en apoyos y recursos”.
· Las necesidades educativas especiales no se consideran un déficit, es decir, no son una característica del alumno ni algo intrínseco a él.
· Las necesidades educativas especiales surgen de la dinámica que se establece entre las características del alumno y las respuestas del entorno, especialmente de los ámbitos que asumen prioritariamente las funciones educativas: el familiar y el escolar.
· Las necesidades educativas especiales se pueden asociar a factores emocionales, discapacidad, aptitudes sobresalientes entre otros.
· Las necesidades educativas especiales se pueden cubrir o reducir considerablemente con la intervención educativa.
· El término se puede aplicar a niños y niñas con o sin discapacidad que presentan un ritmo para aprender muy distinto al del resto de sus compañeros, este ritmo puede ser más bajo o más alto por lo que abarca a quienes tienen serias dificultades para aprender y también a los que manifiestan aptitudes sobresalientes.



No hay comentarios:

Publicar un comentario